En realidad quien sabe para que servirá hacer las cosas bien, si de todas formas cuanta mas la apariencia y el papel que se acredite como una persona honorable y de buena moral.
Cuando uno conoce a personas sin escrúpulos capases de matar por llegar a su meta, “perversidad en plenitud”, es una vergüenza ser parte de esa misma raza y te preguntas si estas en el camino correcto porque resulta que de repente te enteras cuanto es lo que ganan como sueldo y…. Bueno te vas para atrás y lo peor del caso es que solo es el principio de la suciedad burocrática en la que vivimos.
Ahora veo como es que se va engendrando esa sabandija que después esta en algún puesto directivo hablando de equidad, humanidad y demás discursos asombrosos que traen detrás toda una intención y no precisamente clara.
Alguna alución en particular, a alguien que conozcamos en común, jajaj,mejor lo dejamos así.
ResponderEliminarPorque es muy cierto lo que comentas ENTRE EL DISCURSO Y LOS HECHOS hay mucho trecho, mas bien un ABISMO.
Más aún cuando se vive DE LA EDUCACION Y NO POR LA EDUCACION SE CONVIERTEN ESOS SERES EN SABANDIJAS
ES MAS INCLUSO LAS LLAMARIA Sanguijuelas por lo molestas que pueden resultar.
En otras palabras se la viven dando discursos y juzgando a los demas cuando en realidad ni siquiera son capaces de hacer algo desinteresado. lo cual es oprobioso.