Hoy me fui al trabajo en el camión (el colectivo), siempre es un gusto para mí descansar de manejar porque cuando vas en carro el tiempo lo optimizas, pero sacrificas la tranquilidad y el receso que se puede dar uno cuando va en el camión pensando y reflexionando, además se encuentran diversas expresiones culturales que en sus formas cautivan o simplemente hacen que el rato sea mas llevadero, y de vez en cuando hasta te das el lujo de escuchar conversaciones ajenas, como la que yo escuche;

Una trabajador de la construcción (un maistro) comentaba con su compañero de viaje, <mientras se aferraba a los barrotes del urbano para no caerse>, Vengo viajando desde las 6:30 de la mañana y todavía le cuelga, y el otro le respondía, yo vengo desde las 6, para ese entonces ya eran las 8:50 de la mañana, después de un empujón pude volver a poner atención y escuche que comentaban: estoy trabajando con un cuate que me paga bien pero se pasa, no nos deja salir temprano trabajo de las 9 o 10 hasta las 8 de la noche y hasta los sábados y si por el fuera hasta trabajaríamos los domingos, y el compañero le decía no pues esta cabron no hay chance de hacer nada y el otro sabiamente comento yo no se si voy a seguir trabajando ahí, me pagan bien pero ni puedo pasear cuando llego así ni vale la pena ganar tanto, no lo puedes disfrutar y el otro asentaba con la cabeza.

Yo no sabia si reír o llorar porque pensaba que en ocasiones uno se esmera en estudiar y prepararte para después cuando por fin eres un jefe trabajas de 8 de la mañana a 10 de la noche y aunque ganamos "comparativamente mas"* que un humilde trabajador de la construcción, uno no se puede dar el lujo de decir que vale mas disfrutar el poco dinero que uno tiene que ganar tanto y no saber disfrutarlo, y eso pasa porque cuando te vuelves dependiente del dinero las necesidades crecen y después es cada vez mas difícil saciarlas.

*A veces el oficio de la contracción da mayores retribuciones económicas que otras profesiones reconocidas de mayor categorías por a sociedad.